En las tierras de Oriente Medio, además, quedan por extraer más de la mitad de las reservas de petróleo de todo el planeta. Imagino que no hace falta insistir en la trascendencia planetaria de este carburante (impuesta por determinados gobiernos, todo sea dicho). Arabia Saudí, por ejemplo, es el primer país productor de petróleo de todo el mundo, con un 12% de toda la producción mundial de barriles de oro negro.
Religiónes, carburantes, dinero, poder, territorialidad... ¿Quién no ha oído alguna vez hablar de Oriente Medio como la "zona más inestable del planeta"? Una forma un tanto refinada de decir que esta, seguramente, bella esquina de nuestro pequeño planeta camina sobre la cuerda floja (y nosotros con ella). Por estos motivos, es bastante común encontrarse con un montón de informaciones sobre Oriente Medio en las secciones internacionales de los periódicos. El rotativo británico The Guardian, probablemente uno de los mejores periódicos del planeta (no es que yo haya leído muchos), organiza estos días en Londres la exposición Lighting Camps: cartoons from the Middle East, que recopila el trabajo de dibujantes procedentes de países árabes sitos en Oriente Medio. El que esto escribe se ha enterado de la exposición a través de la recomendable web del periódico y no ha podido evitar fusilar algunas (casi todas) viñetas expuestas y tomar otras prestadas de esta inmensa hemeroteca que es la red.
Explicar la función, el valor y el poder de las viñetas políticas en países en los que caricaturizar a sus gobernantes es muy difícil, muy arriesgado o directamente ilegal (incluso más que dibujar al principe de este país copulando con su señora) nos llevaría tanta tinta inútil que casi mejor les voy dejando con estos bonitos recortes. Que las imágenes hablen por sí solas.
Empezamos nuestro recorrido por Palestina, un país sin estado cuya población civil lleva seis décadas de ocupación y pérdida de identidad sobre las espaldas (con todo lo que seis décadas dan de sí). El colectivo ZAN Studio (no pierdan ni un detalle de su web) fue fundado por Amer Shomali y Basel Nasr y ofrece desde octubre de 2005 un espacio de creación para todo tipo de artistas palestinos. Su obra es fundamentalmente visual, política y reivindicativa. Denuncian la ocupación israelí y promocionan, por ejemplo, el boicot de productos judíos.
Emad Hajjaj nació precisamente en Ramalah en 1967 y se educó en un campo para refugiados palestinos en Jordania, país en el que vive actualmente. En el año 2000 fue expulsado del principal periódico jordano, Al Rai, en el que llevaba trabajando siete años, porque no gustaban algunas de sus viñetas políticas. Actualmente colabora con Al-Quds Al-Arabi, periódico árabe editado en Londres. En su página web se puede disfrutar de gran parte de su obra (no se pierdan sus viñetas de septiembre de 2001). Lástima que no todos sepamos leer árabe.
"Líderes", 21 de agosto de 2001, Emad Hajjaj.
"Normalización arabe-israelí", 8 de abril de 2005, Emad Hajjaj.
"Normalización arabe-israelí", 8 de abril de 2005, Emad Hajjaj.
Jalal Al-Rifai, curiosamente, también vive en Jordania y es natural de Ramalah. Por su edad (nació en 1946) pueden adivinar que es uno de los dibujantes más veteranos del mundo árabe, además de ser considerado por la clase intelectual árabe como "uno de los pocos dibujantes capaces de tomar el pulso de las calles" de Oriente Medio. Actualmente dirige la Asociación de Dibujantes Jordanos. Su temática igualmente bascula entre los temas sociales y la política.
La viñeta que pueden ver un poco más arriba ha de ser leída de derecha a izquierda. Para el dibujante libanés Armand Homsi, la columna de humo ha pasado a ser el monumento más conocido de Beirut (la capital de su país). En 2006, los paramilitares de Hezbolá desencadenaron una crísis con el Estado de Israel tras asesinar a ocho soldados judíos y secuestrar a dos, que se saldó con bombardeos diarios sobre la capital libanesa y la consabida respuesta de Hezbolá sobre ciudades del norte de Israel.
En la viñeta de más abajo, el dibujante hace referencia de las dificultades de los graduados universitarios para encontrar trabajo en Líbano. La famosa fuga de cerebros: en cuanto les dan el título se largan del país. Sin salir del aeropuerto, un poquito más abajo, explica por qué el ex presidente libanés Emile Lahhoud se llevó tanta gente a su visita a las Naciones Unidas en 2005.
La viñeta sobre estas líneas define perfectamente la persecución ideológica que cada día tiene lugar en los aeropuertos (estaciones de autobús, tren...) del mundo entero; dirigida especialmente a cierto tipo de gente con cierto tipo de rasgos. Su autor, el sirio Ali Ferzat, es uno de los pocos dibujantes árabes con licencia para la mofa, según The Guardian, que en julio de 2002 le dedicaba este artículo y esta galería de imagenes. Su estilo es, probablemente, el más personal de todos los artistas reunidos en este post. Su obra, sin embargo, toma los mismos derroteros que en los casos anteriores: los traumas políticos y sociológicos de la sociedad árabe.
Y llegamos a la todopoderosa Arabia Saudí, país de procedencia de Yazeed Alharthi, farmacéutico y dibujante de 30 años que también denuncia las hipocresías de la sociedad árabe. En la viñeta de arriba (no se pierdan el juego de mesa que aparece a la derecha en segundo plano), Alharthi representa en forma de chiste la estadística de que los niños en Arabia Saudí pasan más tiempo con las empleadas del hogar que con sus propias madres. En la que hay bajo estas líneas se mofa de aquello de la limosna obligatoria que, como ven, reciben tanto bailarinas como familias pobres.
Terminamos nuestro viaje por Oriente Medio en Egipto. A sus 73 años, el señor Mustafa Hussein todavía publica una viñeta diaria en Al Akhbar y preside la Asociación Egipcia de Caricaturistas. Con sus dibujos denuncia las injusticias sociales de su país: el desempleo, las dificultades para llegar a fin de mes de la familia media o las colas para obtener alimentos. No me digan que no han puesto la cara de nuestro presidente a la viñeta de más arriba.
Para terminar, la caricatura de otro presidente que ha inspirado muchos de los dibujos de estos humoristas gráficos durante los últimos ocho años. El mismísimo George W recontruyendo Irak.
1 comentario:
Hay un columnista en el Guardian, Charlie Brooks, que algunas veces lo borda y hace unas columnas llenas de crítica y humor, hoy a más tardar escribe hablando del Big Brother al que se está dirigiendo el Reino Unido.
Las veñetas de este post son fantásticas, una verdadera delicia. No quiero dejar de recomendar a Joe Sacco y su formidable Palestine, como una lectura básica para aquellos a los que les guste indagar en la situación de Oriente Medio.
Un abrazo
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